sábado, 23 de marzo de 2013

Crecer

Hacía mucho que no me paraba a escribir en este blog. Lo que empezó siendo la idea de un espacio personal terminó tratándose exclusivamente de mi implante, de los cambios, etc. De todas formas no me arrepiento de nada; volver a leer todo esto, revivir lo que pasé... parece surrealista.
Sé que en la última publicación no parecía muy contenta porque realmente no tenía una idea clara de lo que iba a ser trabajar sobre mi audición. Literalmente no había ningún tipo de conocimiento sobre lo que venía después, que era lo que más me aterrorizaba: la incertidumbre, el cambio radical. No obstante, por el momento, siempre que dejo pasar un tiempo desde la calibración me adapto y me empieza a gustar muchísimo. En esta cuarta calibración, como había comentado, empecé con algunas molestias que poco a poco se fueron esfumando y que después se convirtieron en una alegría enorme. La rehabilitación incluye el escuchar mientras una persona me lee un texto sin mirar el movimiento de los labios. Así, después de 17 años, escuché finalmente a mi mamá leerme sin tener que mirarla ni hacer demasiado esfuerzo. No se imaginan la emoción, el fluir de las palabras entrando en mis oídos. Por un momento pensé que me estaba imaginando en mi cabeza todo lo que me decía porque simplemente era demasiado extraño esto que estaba viviendo! Y son en esos pequeños momentos que pienso que no me tengo que desanimar, que todo lo que estoy viviendo es demasiado lindo como para desperdiciarlo con pensamientos negativos.
También me acuerdo que dije que la gente hablaba mucho sin decir nada. Creo que fue una exageración, puesto que ahora yo también estoy empezando a hablar hasta por los codos! Así que es bueno, la comunicación es buena. Y me gusta ese mundo, pero también extraño un poco el mío de antes. Ahora no puedo vivir sin el implante, y me frustro mucho cuando me lo tengo que sacar, por ejemplo, para ir a deporte. No entiendo nada cuando me hablan, y cada vez me percato más de lo poco que escuchaba y que me conectaba con la gente. Pero estaba bueno, tenía sus ventajas - al menos para mí - solo que ahora me parece extraño tanto silencio.
Al final de la cuarta calibración ya me había acostumbrado mucho y entonces, en comparación con al principio, empecé a escuchar bastante bajo: me perdía más cosas, me tenía que concentrar más, era más trabajo. Por suerte, el jueves pasado tuve la quinta calibración! Yo pensé que me iba a morir de lo fuerte que iba a estar, pero sorprendentemente es bastante tranquilo y suave. No hay cambios drásticos, sino que ahora puedo escuchar con más claridad. Me sigue resultando rarísimo que todo se escuche tan natural, no lo puedo creer. Y todavía me acuerdo de ese momento en el que me desperté después de la operación y pensé: ya está. Ya había empezado con todo antes de saberlo. Así que hoy por hoy estoy contenta de decir que me encanta poder escuchar a los demás de una forma que no lo hacía antes. Me encanta hablar mejor, más fluído, que me guste mi voz. Me encanta todo a pesar de que muchas veces me dé fiaca hacer ejercicios. Y me encanta poder ayudar a otra gente con mi testimonio.
Y me olvidé de contar! El otro día cuando volvía de la calibración  en colectivo me quedé dormida y escuché a una persona pedirme permiso! Cuándo fue la última vez que había escuchado a alguien hablarme tan claro mientras dormía? Pensemos. Nunca. Y después tuve una conversación con una señora mayor que era muy amable. Todas estas cosas, por más pequeñas que sean, suponen una felicidad inmensa para mí. Por eso no me arrepiento de nada, porque hoy veo lo mucho que estoy creciendo.

jueves, 31 de enero de 2013

Y ahora?

Oleada de cambios con la 4ta calibración!
Es abrumador.
No me malinterpreten, me encanta poder escuchar miles de cosas que no sabía que existían. Escuchar ramas y hojas crujir, grillos, las campanadas del tren, mi celular (que por cierto tiene un ringtone deplorable, me di cuenta un poco tarde), color adicional en las voces, y mucho más que no recuerdo. Incluso ya puedo entender muchas frases sin leer los labios!
Cuál es el problema entonces? Los primeros días posteriores a la calibración fueron duros. El sonido es muy pero muy fuerte e intenso, y me aterra un poco imaginarme cómo va a ser dentro de un año. Hubo un día en que me dolió la cabeza también, era un poco demasiado. Por suerte se me pasó y ahora no me molesta en lo absoluto. Como decía, me encanta poder escuchar todo esto, pero...
Digamos que estaba acostumbrada a no darle tanta importancia a lo que decía la gente porque de todas formas no iba a entender lo que salía de sus bocas. Ahora no pasa eso. Ahora escucho casi todo, sin que yo haga mucho esfuerzo. Presto un poco de atención y ya está. Qué me hace sentir así entonces? La gente que habla sin decir nada. Hablan, hablan, hablan, hablan. No me puedo imaginar un mundo en el que se desperdician tantas palabras. Por suerte yo cuento con mi as bajo la manga, que tranquilamente lo pueden hacer los normoyentes por otros medios. Me saco los audífonos y paz. Tirarme a no hacer nada en el jardín, con los sonidos pasando a un segundo plano, sintiendo el vientito contra mi cara. Nada más. No podría sobrevivir sin esas escapadas mentales que hice durante toda mi vida prácticamente.
Sin embargo mi emoción perdura. Me di cuenta también que puedo cantar mejor. Como ahora escucho 2, casi 3 octavas más que antes, puedo cantar más agudo. Es lo que me permite hablar más claro también. Me dijeron que está saliendo mi voz verdadera, que ahora se me escucha mucho más dulce, pronunciado y fluído, y eso me alegra muchísimo (: También me di cuenta que cuando me saco los audífonos y canto, prácticamente no me escucho y es mucho más difícil que con el implante encendido.
Así que no todo es malo, al contrario. Después de todo lo bueno que me pasó, me había olvidado que iba a tener que trabajar un poquito. Nadie dijo que iba a ser fácil. Es más, ya estoy haciendo ejercicios para distinguir las vocales (que para los que no lo saben, para mí es manso trabajo). Pero estoy contenta! Una y otra vez me acuerdo de cómo estaba hace poco más de un año y no puedo creer que haya llegado tan lejos. Es increíble.

miércoles, 16 de enero de 2013

Mejorías y más detalles

Mañana es la 4ta calibración! La gente me dice que estoy hablando mucho mejor, también que entiendo más, y yo misma puedo corroborar eso. Siento que todo fluye y me encanta que me lleguen detalles a los oídos que antes ni registraba. Lo mejor es cuando la gente me pregunta cómo avanzo: yo misma me asombro de lo que digo. Es como si todos dieran por sentado el sonido, los detalles, cuando yo me emociono por el ruidito que hace el interruptor cuando lo aprieto para encender y apagar la luz, como para darse una idea de mi emoción. Es todo tan lindo, tan lindo, y tan fácil! Hasta por momentos me olvido que tengo el implante puesto, es muy cómodo y natural. Lo que sí, me molesta cuando me toco el pelo y se me cae el audífono, es el único inconveniente que tengo. De todas formas, es lo de menos. Ni que me fuera a enojar o frustrar por eso con todo lo que estoy ganando. Solo noto las diferencias cuando me levanto y cuando me acuesto; son dos mundos completamente distintos. Ponerme y sacarme el audífono marca muchísimo la diferencia. Es más, me brinda la posibilidad de realmente escuchar la voz de las personas aunque haya ruido, que sin el implante escucharía todo apagado y grave. Realmente me alegra mucho haber hecho esto. Pensar que mañana es la fecha en que se cumplen 3 meses desde que me implanté, es impresionante. Estoy muy emocionada por descubrir qué me va a dar esta nueva calibración. Fingers crossed! Después actualizaré mis nuevas aventuras sonoras. Hasta la próxima :D